Se promueve el desarrollo del pensamiento lógico, abstracto, la autonomía académica, las habilidades cognitivas, espirituales, actitudinales, motoras y emocionales, que permiten un aprendizaje permanente y con mayor grado de complejidad. Planteando retos cognitivos que se adecuen a su desarrollo y sustentados en la neuroeducación y diversidad de estrategias.